El pasado jueves 13 de Marzo, la
banda finlandesa de power metal melódico, Sonata Arctica, llegó a
Colombia para ofrecer el setlist más variado de todas sus giras;
esto se debió a que están en su gira por Latinoamérica, celebrando
sus 15 años de haber grabado su primer álbum en estudio (Ecliptica
1999).
Las afueras del teatro Ecci El
Dorado recibió a los fanáticos de la banda desde las horas de la
mañana, que comenzaban la fila para disfrutar más de cerca este
“show especial” como lo nombraron los mismos integrantes de
Sonata.
Alrededor de las 6 de la tarde,
llegó una camioneta con los cinco integrantes de Sonata Arctica, la
emoción llegó a todos los que estaban en la fila de dos cuadras
aproximadamente. Ya Sonata Arctica se disponía a hacer la prueba de
sonido.
A las 7 de la noche, se acerca uno
de los organizadores del concierto a cada grupo en la fila,
preguntando quién tenía las boletas con los números de la 1 a la
15, para un Meet&Greet con la banda. También entraron al
encuentro unos fanáticos con cinco camibusos de la Selección
Colombia, con el nombre de cada integrante de la banda; ese fue el
presente más admirado del día.
Antes de las 8:00p.m se abren las
puertas del teatro, para dar inicio al show a las 8:40p.m. La banda
comienza con su nuevo single The Wolves Die Young de su álbum
próximo a lanzarse, Pariah’s Child, haciendo que la audiencia
saltara y cantara su pegajoso coro. Después de un gran saludo por
parte de Tony Kakko, vocalista de la banda, se disponen a alegrar la
noche de los sonateros, recorriendo todos sus álbumes con las
canciones más significativas para la banda y el público, como: My
land, Paid in full, Victoria’s Secret, White pearl, Black ocean.
Black sheep, Sing in silence, Talullah, I have a
right, Replica, la infaltable Full Moon, entre otras.
Después de un pequeño descanso de
5 minutos, vuelve al escenario la banda, pero con la sorpresa de que
estaban usando los camibusos de la Selección Colombia, como
agradecimiento a tan buen recibimiento. Como era de esperarse, hubo
más emoción entre los asistentes. Después de esta sorpresiva
salida, cantaron sus últimas tres canciones: Cinderblox, The cage y
Don’t say a Word, pero con un final divertido: “We need some
vodka”, esa fue la frase que entonó todo el teatro finalizando el
concierto.
Sin duda la pasión de Tony sobre el
escenario, el talento de Elias en los solos de guitarra, la simpatía
de Pasi, las manos prodigiosas de Henrik en el teclado y la energía
de Tommy en la batería, hicieron del concierto un momento
inolvidable para todos sus fans.